México: AMLO inauguró el Tren Maya, su megaobra para el turismo, en medio de polémicas y una fuerte resistencia de los ecologistas

México: AMLO inauguró el Tren Maya, su megaobra para el turismo, en medio de polémicas y una fuerte resistencia de los ecologistas

 

El Tren Maya, obra turística emblemática del presidente Andrés Manuel López Obrador, se inauguró este viernes con una promesa de prosperidad para una de las regiones más empobrecidas de México, y bajo acusaciones de haber devastado el medio ambiente.

 

López Obrador dio inicio a la operación entre la ciudad colonial de Campeche y el popular balneario caribeño de Cancún, principal destino turístico de este país, que entre enero y octubre pasado recibió a 34 millones de visitantes extranjeros, según cifras oficiales.

 

“El Tren Maya es una obra magna, no exageramos si decimos que no hay otra así en el mundo, que se logró en tiempo récord”, celebró el mandatario mexicano en su conferencia de prensa matutina.

 

Se trata del primero de siete tramos que recorrerán en total 1554 km alrededor de la península de Yucatán, una zona rica en flora, fauna y ruinas arqueológicas. Los demás quedarán operativos en el primer trimestre de 2024.

 

El precio de los boletos para este primer tramo, que comenzará a operar este sábado 16 de diciembre, se fijó en 1166 pesos mexicanos (68 dólares) para la clase turista y 1173,50 pesos mexicanos (US$108) para los asientos más caros.

 

El proyecto, cuya construcción arrancó hace cinco años, recibe el banderazo de salida a seis meses de las elecciones presidenciales, en las que –según encuestas– la izquierda es favorita para seguir en el poder con la exalcaldesa de Ciudad de México Claudia Sheinbaum, quien enfrentará a la exsenadora opositora Xóchitl Gálvez.

 

El gobierno presupuestó originalmente 150.000 millones de pesos para la obra (unos 8700 millones de dólares), que sufrió modificaciones y parálisis temporales por demandas durante su ejecución, a cargo del ejército mexicano y empresas privadas.

 

Sin embargo, el Instituto Mexicano de la Competitividad (IMCO) estima que el costo se multiplicó hasta los 30.000 millones de dólares.

 

Según el diario El País, el primer tramo incluye en total 473 kilómetros de todo el sistema repartidos en tres Estados: Campeche, Yucatán y Quintana Roo, de un proyecto de más de 1500 kilómetros. Se abrirán inicialmente 14 estaciones de 34, pero incluso en ese estreno parcial no está todo listo; en el tramo 4 aun las obras no están concluidas, y en Chichén Itza y Cancún están terminando las estaciones. Está previsto que la inauguración del tramo 5, 6 y 7, sea a finales de febrero de 2024.

 

“Ecocidio”

 

El tren, cuyos vagones fueron construidos por la francesa Alstom en su planta de Ciudad Sahagún (centro de México), representa uno de los principales proyectos de infraestructura del gobierno de López Obrador junto con una refinería en Tabasco, un nuevo aeropuerto que sirve a Ciudad de México y un corredor interoceánico, que se construye como alternativa al Canal de Panamá.

 

El primer mandatario de izquierda de México asegura que el proyecto –que en una segunda fase incluirá vagones de carga– ayudará a la economía del sureste del país, una región históricamente rezagada frente al industrializado norte, fronterizo con Estados Unidos.

 

Previo a la inauguración, el gobernante dijo que el Tren Maya, que combinará trenes eléctricos y de biodiésel, tendrá un efecto multiplicador en el resto de México, al subrayar que varios insumos fueron fabricados localmente

 

El trazado incluye partes de la paradisíaca Riviera Maya, que abarca una región selvática considerada la segunda reserva forestal de América Latina después del Amazonas, así como cenotes (pozos de agua dulce) y ríos subterráneos.

 

Activistas y organizaciones ambientales sostienen sin embargo que la obra daña dicho ecosistema, y lograron paralizarla temporalmente mediante recursos judiciales que denunciaban un “ecocidio”.

 

Pero López Obrador emitió un decreto que declara sus obras de infraestructura como asunto de “seguridad nacional” y la construcción siguió adelante.

 

Greenpeace y otras ONG han alertado que el tren amenaza con contaminar en particular cenotes y ríos subterráneos. También señalan que el suelo puede colapsar por el peso de la estructura, además de afectar flora y fauna.

 

López Obrador ha tachado a los inconformes de “pseudoambientalistas” y ha defendido la obra en varias ocasiones, prometiendo la siembra de millones de árboles en la zona intervenida. No obstante, cifras oficiales divulgadas por el portal Animal Político en febrero de este año señalaron que 3,4 millones de árboles habían sido ya talados o removidos.

 

Fuente: www.lanacion.com.ar

 

 

Regresar

Cargando...